Las arrugas no perdonan a casi nadie a determinada edad. Pero también es cierto que existen muchas formas de combatirlas, varias de ellas totalmente naturales y al alcance de la mano de cualquiera. Una de las causas de su aparición puede ser la resequedad de la piel, algo que puede combatirse a través del uso de un buen remedio casero que consiste en mezclar tres ingredientes sumamente hidratantes: pepino, aloe vera o sábila y aceite de oliva. Sólo es cuestión de intentarlo.
Ingredientes:
Preparación:
Comienza la preparación de este remedio natural contra las arrugas colocando el pepino (con su piel) y la pulpa de aloe vera o sábila en un mortero o simplemente en el vaso de la batidora. Añade el aceite de oliva y procesa hasta obtener una pasta bien homogénea y sin grumos.
Lo ideal de este remedio casero antiarrugas es aplicarlo directamente a la noche untando suavemente sobre las arrugas con un pincel o algodón, dejando secar y que actúe durante toda la noche. Se retira simplemente con un poco de agua tibia a la mañana siguiente.